Español
Una casa del apellido A. hubo en la anteiglesia de Lemona, del partido judicial de Durango (Vizcaya). Otra casa radicó en el caserío de Oyanecoa, inmediato a la aldea de Bernagoitia, del Ayuntamiento de Amorebieta, en el mismo partido judicial de Durango. En dicho caserío se conserva un árbol genealógico, en el que se hace constan que esta familia procede del barrio de Oba, u Obas, del Ayuntamiento de Dima, también del partido judicial de Durango. De esta familia fué doña Micaela de A. y Candelategui, que vivía en 1873, año en que se quemó el archivio parroquial de Dima. Son sus armas: Partido: primero, de azur, con un pescador de caña, sobre el ribazo de un río, pescando, y segundo, de gules, con dos calaveras de sable, puestas en palo, y entre las dos, una daga de plata, con la punta ensangrentada y puesta en sentido horizontal. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia A., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento palo es la característica de los nobles de origen militar, (Palos) quiere aparentar los palos del "castrum" (campamento). Los esmaltes del arma de los A. pregonan los siguientes valores: el Azur corresponde al símbolo del agua, de la continuidad de la vida, es un color de nobleza, belleza, castidad y fidelidad, además otras virtudes caracterizaban a la familia, tales como la abundancia económica, la perseverancia, la suerte, la fama y el afán de victoria.