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En la villa de Trucios, y en el barrio de Cueto, inmediato a ella, todo en el partido de Valmaseda (Vizcaya). Las armas de la casa de la villa de Trucios son: De oro, con un águila de sable, y bordura de gules con cuatro veneras de plata, una en cada cantón, y cuatro estrellas del mismo metal en los centros. La casa del barrio de Cueto, apellidada T. y Huerta tiene: Escudo dividido en siete cuarteles: primero, águila en defenda; segundo, cinco flores de lis y tres palos o bastones; tercero, una cruz de Calatrava, y bordura para este cuartel con cuatro calderas; cuarto, una mano palmada, y debajo, ondas de agua; quinto, una estrella; sexto, otra estrella, y séptimo, una mano vista por el dorso, y debajo, ondas de agua. Estas armas, que son de alianza, fueron las usadas por don Felipe de los T. y Huerta, natural de Trucios y Arzobispo de Granada en 1741. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia D., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento águila , que es la más noble de las figuras utilizadas en heráldica, es el símbolo del rey del cielo, emperador de los pájaros, custodia del rayo y su significado es el de la fuerza y poder terrenal por la Gracia de Dios. Los esmaltes del arma de los D. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los