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Apellido de origen francés, que se afincó en Canarias a principios del siglo XIX. Don Carlos Estaban G. y Poujol, compositor francés nacido en Orange el 11 de octubre de 1799, fijó su residencia en Santa Cruz de Tenerife, cuando se encontraba de paso para el Brasil adonde iba contratado por el Emperador Pedro I, como maestro de su capilla musical. Fue fundador de la Sociedad Filarmónica el año 1827. Don Carlos Esteban G. contrajo nupcias en Santa Cruz de Tenerife, con Doña Matilde del Castillo e Iriarte, hija de Don Francisco del Castillo Sanfelices y de su mujer Doña Catalina Iriarte y Nieves-Ravelo. De este matrimonio hubo tres hijos: Matías, Carlos y Francisco. Don Matías G. y del Castillo, casó en Santa Cruz con Doña Rafaela Costa y Grijalba, de la que tuvo un descendiente: Don Diego G. y Costa que contrajo nupcias dos veces; la primera con Doña Rafaela Costa e Izquierdo, procreando seis hijos, y la segunda con Doña Gertrudis Segovia Álvarez, hija del Conde de Casa Segovia, de la que no tuvo descendencia. Don Diego G. y Costa, benemérito Doctor, fundó el Hospitalito de Niños de Santa Cruz de Tenerife, Institución única en Canarias, desde el año 1901, en que fue creada. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia G., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los G. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los metales.