Español
Ilustre y noble linaje de Castilla. Es tan grande su antigüedad, que el célebre cronista Ambrosio de Morales dice en su "Crónica general de España", que en la mayor parte de los privilegios del tiempo del Rey Don Alonso III el Magno, confirman como gente principal los Osorios, Tellos, Ansúrez, A. y otros. En el siglo XV aparece radicada en la provincia de Salamanca una noble familia de A., que dió nombre al lugar así llamado en el partido judicial de Alba de Tromes. De esa familia dimanaron importantes ramas, entre otras, las de Peñaranda y Piedrahita, y la que, andando el tiempo, se estableció en la Habana. De los A., de Salamanca, fué Gonzalo de A., que casó con doña Inés de Armoelle, y fueron padres de Juan de A., que vivió en el lugar de Candelario. Casó dos veces: la primera con doña Catalina de Valdecarros, y la segunda en la villa de Piedrahita (Ávila), con doña Juana de Olivares. Litigó este Juan su hidalguía en el Concejo de homes buenos de la ciudad de Salamanca y en la Real Chancillería de Valladolid, y ganó ejecutoria de nobleza ante los Alcaldes de los hijosdalgo de León, que dictaron sentancia a su favor el 13 de Noviembre de 1514, según testimonio del mismo mes y año. Tuvo los siguientes hijos, según consta de una información de hidalguía hecha por uno de ellos en Piedrahita el año de 1540. Melchor de A., que sigue; Gaspar de A., que fué el que hizo en Piedrahita la información de hidalguía citada; Antonio de A., fraile; Baltasar de A.; Juan de A.