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Apellido de origen andaluz. Procede de Jaén, donde se había establecido desde que pasó de Portugal a España en el reinado de Don Enrique III "el Doliente". En 1573 vivía en Tenerife Pedro C., de origen portugués, casado con Margarita Bello. Probó su nobleza en la Orden de Santiago en 1614 y 1664. Don Alfonso XII concedió, en 27 de diciembre de 1875, el título de Conde de C. de Portugal a don Diego C. de Portugal y Quesada. Don Alfonso XIII concedió en 1917, sobre un antiguo Señorío de la Casa, el título de Conde de Pozo Ancho del Rey a don Alfonso C. de Portugal y Contreras. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia C., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento león , que es la más noble de las figuras junto con el águila, significa que el origen familiar es muy antiguo o del Reino de León o de Inglaterra, generalmente podríamos pensar que los poseedores de tal símbolo estaban emparentados de alguna forma con la realeza. Los esmaltes del arma de los C. pregonan los siguientes valores: la Plata corresponde al símbolo de la Luna, pureza, sinceridad, templanza, clemencia y amabilidad son las características espirituales de la familia, a las que hay que añadir otras como el afán de victoria y éxito y la elocuencia.