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Nombre latino. De Lucinus, relativo a la luz, al nacimiento, aplicado como sobrenombre de Juno o Diana, diosa que presidía los nacimientos, al traer a los niños a la luz del mundo. Sal Lucio, rey bretón del tiempo del papa Eleuterio, después de convertirse marchó como misionero a Suiza y fue el primer obispo de Coira. Senador o dignitario de Cirene (Africa), que se convirtió al cristianesimo al ver el valor con que lo confesaba el mártir san Teodoro, obispo. El mismo ganó para la fe al magistrado Digniano; ambos se retiraron a la isla de Chipre junto con otros ocho cristianos, y todos fueron muertos durante la persecución de Diocleciano en el año 311. Conmemoración el 20 de agosto. San Lucio I papa, sucedió en el pontificado a Cornelio en el año 253 y murió en el 254. Vuelto del destierro al que le condenara el emperador Triboniano Galo, gobernó la Iglesia sólo durante ocho meses. Su fiesta se celebrar el 4 de marzo. Este apellido procede de Aragón y la Rioja. Pasó a Vizcaya, funando noble casa en la villa de Bilbao. Gonzalo L. fué Comendador de Villamartín y de Peña, en la Orden de Santiago, en tiempos del Rey don Enrique III, de Castilla, el Doliente. Otro Gonzalo L. Comendador de Calatrava la Vieja y Gobernador del Campo de Calatrava. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia L., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los L. pregonan los siguientes valores: el Azur corresponde al símbolo del agua, de la continuidad de la vida, es un color de nobleza, belleza, castidad y fidelidad, además otras virtudes caracterizaban a la familia, tales como la abundancia económica,