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Apellido canario, oriundo de Milán. Una rama se estableció en Jerez de la Frontera. El 28 de enero de 1594, contrajo matrimonio Don Cristóbal Machado Becerril y Coronado, Capitán de las Milicias provinciales de Tenerife con Doña Leonor S. y Lugo. Esta era hija de Agustín Alberto Geraldín, noble de Florencia, patrono de diez iglesias en aquella ciudad y Doña Catalina S. Palenzuela y Lugo, su mujer, nieta paterna de Juan Alberto Noldo Geraldín, que obtuvo repartimientos de tierra en la isla de Tenerife y de Doña Leonor Viña Negrón, hermana del maestre de campo Fabián Viña Negrón, tambíen noble italiano, alcaide perpetuo del castillo de San Miguel de Garachico, edificado a su costa; y nieta materna de Tomás Rodríguez de Palenzuela y de Doña Mencía S., que a su vez era hija de Rafael S., noble genovés, alcaide de las fortalezas de La Palma en 1516, y de Doña Catalina Gutiérres de Lugo, ambos antepasados de casi toda la nobleza isleña. Sucedió en la Casa, Don Matías Machado-S. y Lugo, II del nombre, nacido en La Laguna, Capitán de Infantería del Regimiento provincial de Tacoronte y castellano del de San Juan Bautista en el puerto de Santa Cruz de Tenerife; casó el 27 de enero de 1624, con Doña Anastasia de Lezana Ocampo y Guerra, hija del maestre de campo Don Juan de Lezana Miranda. Continúa la descendencia su hijo Don Sebastián, tercero del matrimonio. Don Ambrosio de S. fue creado Marqués de Montemolín en 1684, y Don Benito Antonio de S., Marqués de S., en 1752. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia S., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento faja quiere decir que pertenecieron