Español
El primitivo solar del linaje de E. de los Monteros, lo tiene en el pueblo de su nombre, en la provincia de Burgos, habiéndose extendido por toda España y tomando otras denominaciones como E. y E. de la Puerta. Una de la ramas se estableció en Extremadura, en Don Benito, provincia de Badajoz, de donde procede la fundada en Tenerife por Francisco E. de los Monteros, conquistador de dicha isla y de la de San Miguel de la Palma, con su hermano Diego y su padre Antón E. de los Monteros, que concurrió igualmente a la conquista de ambas islas y fue Gobernador de la isla de El Hierro. La representación de la rama primogénita de esta familia entró en la de Tabares por el casamiento que su última poseedora, Doña Josefa E. de los Monteros de la Puerta, contrajo en 1809 con su primo hermano Don Rafael de Tabares y Franco de Castilla. Francisco E. de los Monteros, Conquistador de Tenerife, fue padre legítimo de Agustín E. de los Monteros, natural de Sevilla, que vivió en Tenerife en los comienzos del siglo XVI y con Catalina González su mujer, tuvo tres hijos. Agustín, el segundo, sigue la línae. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia E., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los E. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los metales.