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En 24 de agosto del año 1702,el rey Don Felipe V concedió el título de marqués de Poveda para sí y para sus descendientes, en premio de señalados servicios prestados al Estado, a Don Tomás M. de Poveda, caballero de la órden de Santiago, del consejo de guerra y presidente de la audiencia de Chile, en América. Por referencias de historiadores de la época y otras averiguadas por Araldis en los archivos registrales de ciudades y otros privados, podríamos afirmar, pero no asegurar, que este escudo u otro muy similar a él, apareció inicialmente desde el siglo XI al XIV, particularmente en las celebraciones de 1221 con motivo de la colocación de la primera piedra de la Catedral de Burgos por D. Fernando, rey de Castilla llamado el Santo. Todo ello parece coincidir con la memoria familiar de algunos de los miembros de la rama de la familia Marin De Poveda. Son sus armas: Partido; el primero de plata y tres fajas de azur ondeadas, que es de Marin; el segundo de oro y un árbol con dos jabalíes empinantes al tronco; bordura del segundo ajedrezada de plata y sinople. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia M., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento faja quiere decir que pertenecieron a órdenes militares de caballería. Los esmaltes del arma de los M. pregonan los siguientes valores: la Plata corresponde al símbolo de la Luna, pureza, sinceridad, templanza, clemencia y amabilidad son las características espirituales de la familia, a las que hay que añadir otras como el afán de victoria y éxito y la elocuencia.