Español
Desciende este apellido de una noble familia genovese, de cuya República vino a Las Palmas, apenas conquistada la Gran Canaria, como problador de aquella ciudad. Don Teodoro C. el Mayor, tronco de los de este apellido en Canarias, casó con Doña Leonor de Tamariz, ilustre dama de la más alta Nobleza de Andalucía, natural de Carmona, que en 1940 pasó a Canaria con su tío el Doctor Antón Martínez Calvo de Tamariz, Arcediano de Tenerife, Dignidad de este Santa Iglesia Catedral y fundador en ella de la capilla de San Andrés. Doña Leonor de Tamariz era hermana legítima de Rodrigo de Tamariz, Racionero de Canarias, y de Doña Isabel de Tamariz, mujer del caballero francés Juan de Alemaña, Conquistador y progenitores de los Condes de la Vega Grande de Guadalupe; también tuvo otra hermana llamada Inés. Del matrimonio formado por Don Teodoro C. y Doña Leonor de Tamariz, hubo dos hijos; Esteban, que no fue casado y Tomasina, que sigue. Doña Tomasina casó con Luis de Balboa Navarrete, Caballero Hijodalgo de Ubeda, establecido en Las Palmas, en 1553, habiendo de este matrimonio siete hijos; entre ellos, Doña Teodora C. y Balboa, que sigue. Doña Teodora con son Francisco Nicolás Morteso de Casares, nieto paterno de Polo Morteo, caballero genovés y de Isabel Ortiz, vecinos de Las Palmas. Tuvieron cuatro hijos, el segundo de los cuales, Don Esteban C. y Casares, que continúa la línea, fue Capitán de la Infanteria española y Regidor Perpetuo de la Gran Canaria.