Español
Apellido de origen castellano. De las montañas de Santander, desde donde se extendió por toda la Península. Una rama pasó a Canarias llamándose Del H.-S.. Hernando del H. fue le fundador de esta familia en la isla de Tenerife, habiendo sido Conquistador de la misma después de tomar parte en la conquista de La Palma y haber estado anteriormente en la memorable victoria de Granada contra los moros, formando parte de séquito de los Reyes Católicos. Sus descendientes usaron el apellido de Solórzano, por ser este lugar montañés, donde radicó el Solar de su linaje. La representación de este ilustre apellido al tienen distintas familias canarias, en la provincia de Las Palmas. Encontrándose en Barcelona Hernando del H., fue protagonista de un hecho singular. Ejercía a la sazón el cargo de Mozo de Espuelas del Rey aragonés, Don Fernando el Católico, cuando el Soberano sufrió un atentado por parte del traidor Juan de Canyamés, en la Plaza del Rey, el día 7 de diciembre de 1492, siendo salvado por el dicho Hermando, que en un rasgo heróico se abrazó al asesino y le asestó dos puñaladas impidiendo culminara el regicidio. Don Hernando fue Regidor perpetuo de Tenerife y casó con Doña María de Abarca, en la que tuvio seis hijos; el primero, Hernado, que sigue, quetando bajo la tutela de su madre al ocurrir el fallecimiento de su padre, el Conquistador. Los descendientes de este apellido, enlazaron por sus respectivos matrimonios, con las más ilustre familias de Tenerife. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia D., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento flores está ligada al propio (rosas nombre de la familia y a su probable origen foráneo