Español
Según consta en el catálogo de pasajeros del Archivo de la Real Compañía de Indias de Sevilla, Diego P., natural de Granada, hijo de Juan P. y de Catalina de Aranda, con su mujer María Álvarez, natural de Granada, hija de García Álvarez y de Francisca de Canales, y sus hijos Diego P. y Catalina Álvarez, emprendió viaje a Nueva España para ocupar el cargo de Notario según el decreto de nombramiento fechado en Sevilla un año antes; por investigaciones posteriores sabemos que regresó a España 15 años después una vez finalizado su contrato, dejó seis hijos en América a los que reconoció y dotó con generosidad. Son sus armas: En oro, cinco espadas, de sable, puestas en faja. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia P., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento espada indica que la familia tiene origen militar de probado valor a las órdenes en uso de la época. Los esmaltes del arma de los P. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los metales.