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Es cronista y rey de armas de Felipe V, Juan Alfonso de Guerra, incluye a esta familia entre las primeras y más rancias españolas y dice que algunos antiguos historiadores y genealogistas reconocen por su tronco y progenitor a Alfonso de T. Cuervo, descendiente del solar asturiano del linaje de Cuervo, como lo certifica Pedro Mexia de Ovando en su "Nobleza Política", que da a ese linaje la ricohombría y la prerrogativa ducal, según lo atestiguan documentos e inscripciones en sepulcros del monasterio de Oña (Burgos) y la Crónica de San Benito, que también corrobora que los T. proceden de la casa troncal de los Cuervo. El mismo rey de armas hace mención de Pedro Peláez de T."caballero muy poderoso y opulento y Ricohombre, que fundó el monasterio de Santiago a dos leguas de Caracedo, a quien sucedió Pelayo Pérez Cuervo de T., Señor de la casa de Tapia, que obtuvo el alto empleo de Condestable del Rey Sancho "el Gotoso". Pero existe error en este último dato, porque el Rey de Léon conocido por "el Gotoso", no fué ninguno de los que llevaron el nombre de Sancho, sino el Monarca del mismo reino Bermudo II. No dice Juan Alfonso de Guerra, ni otros tratadistas que reproducen las anteriores noticias, cuándo y porqué tomó el apellido T. esta familia, aunque, en realidad, procediese de la casa troncal de Curvo, ni descubre claramente el lugar en que radiaron y tuvieron su solar aquellos de sus primeros ascendientes que comenzaron a apellidarse T.