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Procede de la anteiglesia de este nombre, del partido judicial de Marquina (Vizcaya). también hay de este apellido en Guipúzcoa. Algunos se apellidaron C.-Garay. Son sus armas: De oro, con una calavera de su color, puesta en abismo y cantonada de cuatro matas de torbisco, inclinadas hacia la calavera. Los C.-Garay, también de Vizcaya: Cortado: primero, las armas anteriores, por C., y segundo, de gules, con ocho estrellas de oro, y en el centro un escudete con este lema: "Garay de oro que es Orrio", por Garay, de la casa de Guerricaiz, en Vizcaya. Los C. de Guipúzcoa: De gules, con una torre de plata, y bordura de este metal con cinco armiños de sable. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia C., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los C. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los metales.