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Uno de los próceres canarios que formaron en su descendencia uno de los más notable troncos, fue Juguer Lintevur, a quien después del bautismo se le llamó Juan D. u Oramas (nariz ancha), por haber pertenecido a la familia de aquel célebre soberano de Telde, muerto valerosamente defendiendo su isla de Gran Canaria contra las hestes castellanas. Juan D. se distinguió en las conquistas de Granada y Tenerife al mando de su pariente el famoso aborigen Fernando Guanarteme y, los Reyes Católicos atendiendo a sus servicios y noble origen isleño, le concedieron el privilegio de usar escudo de armas, heredándole además con diferentes datas en el término de la Rambla y los Realejos de Tenerife. Contrajo matrimono con Collarampa, que en le idioma guanche significaba " Estrella", llamada después del bautismo doña Mariana Hernández Bencomo, hija del gran Bencomo, último rey guanche de la comarca de Taora. Este matrimonio dejó tres hijos: Juan de Oramas o D., que casó con Isabel Pérez de Llarena, hija de Andrés de Llarena, guanche de la familia real de Güimar, que murió en Berbería luchando contra los moros y de Doña María de Lugo, su legítima mujer, ahijada del primer Adelantado de Canarias e hija del último soberano de Adeje. María D., que casó con Juan Gomez de Fregenal, también de origen isleño, natural de Gran Canaria y Conquistador de Tenerife. Luchó después en Berbería y testó en los Realejos el 30 de noviembre de 1541. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia D., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los D. pregonan los siguientes valores: el Gules es el símbolo de la fuerza, del poder, del amor ferviente a Dios