Español
Procede este apellido de la villa de la Garriga (cuyo nombre tomó), del partido judicial de Granollers (Barcelona). Una casa hubo en la villa de Aiguafreda, del partido judicial de Gerona y otra en la villa de Verges, del mismo partido. Desde Cataluña pasaron los G. a Valencia y Murcia. De la casa de la villa de Aiguafreda descendió José G., natural de Aiguafreda, que casó con doña Paula Carbonell, natural de Granollers, y procrearon a Juan francisco G. y Carbonell, natural de Granollers, que se unió en matrimonio con doña Esperanza María Noguera, de igual naturaleza, y fueron padres de José Francisco G. Noguera, natural de Granollers, marido de doña María Francisca de Istillarte, natural de Barcelona, a la que hizo madre de Juan Bautista G. e Istillarte, natural de Mataró (Barcelona), y caballero de la Orden de Carlos III, con fecha 3 de noviembre de 1805. A Mallorca pasaron desde Cataluña los G. en los tiempos de la Reconquista, siendo uno de los primeros allí establecidos, Pedro G., natural de Tarragona, que obtuvo en el reparto general la alquería de Alabor, de doce yugadas, en el distrito de Petra. Dalmacio G. se halló presente con otros caballeros el año de 1302, en la confirmación de todos los privilegios y franquezas del reino, otorgadas por el príncipe don Sancho. Jaime G., presbítero, fue el último caballero de otra casa. En 1521 fundó un fideicomiso, en el que sucedió su sobrino Jaime G., y a éste la casa de Moragues. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia G., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los G. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen