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Esta rama se inicia con Francisco Benítez Pereyra de L., Regidor Perpetuo de Tenerife, segundo Patrono del convento de San Lorenzo de la Orden de San Francisco en La Orotava y fundador del Mayorazgo de la rama mayor en 1559. Viudo de Doña Ana Lobón Xuárez Gallinato de Fonseca, casó por segunda vez en julio de 1544, con Doña Isabel de Cabrera Llarena y San Martín, hija de Alonso de Llarena el Viejo, Conquistador, Regidor y Alguacil Mayor de Tenerife y de Doña María de Cabrera San Martín. Continúa la línea su hijo Francisco Benítez de L. y Cabrera, cuyo nieto Don Antonio Benítez de L. y Peña, nacido en Santa Cruz de la Palma y bautizado el 29 de julio de 1609, contrajo enlace en la villa de La Orotava el 7 de enero de 1647, con Doña Isabel Viña de Vergara, hija del Licenciado Don Mateo V de Vergara, Regidor perpetuo de Tenerife, de cuyo matrimonio nacieron dos hijos, siguiendo en la línea y dando ya definitivo nombre a esta rama, su segundo, Don Francisco Benítez de L. y Viña, sucesor en el Mayorazgo. Don Francisco Estanislao de L.Viña y Molina, probó su nobleza en la Orden de Calatrava y en la de Carlos III. También ingresó en esta misma Orden, su hermano Don José Domingo. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia L., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento banda quiere decir que pertenecieron a órdenes militares de caballería. Los esmaltes del arma de los L. pregonan los siguientes valores: el Gules es el símbolo de la fuerza, del poder, del amor ferviente a Dios y al prójimo, tal es el significado de este esmalte,