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Apellido de origen vasco, establecido en Canarias tras la Conquista. El Capitán Juan de M. Uruspuru, que fue Alcalde de Agüimes, en la isla de Gran Canaria, tuvo con su esposa Doña Ursula de Tubillejas, a Cristóbal de M., que contrajo matrimonio en Guía, el 5 de febrero de 1614, con Doña Luisa de Bethencourt Acedo, bautizada el 13 de marzo de 1594. De esta enlace nació: Don Juan de M. Figueroa Bethencourt, que casó en Las Palmas el 20 de septiembre de 1651, con Doña María Martín Ximénez de Orduña, siendo padres de Doña Ursula de M. Bethencourt, casada en Guía el 28 de abril de 1673, con el Capitán Don Juan Benítez de Guzmán y Rojas. Martín de M. Cairasco de Urúspuru y su legítima esposa, Doña Isabel Méndez de Sosa, fueron padres de Doña Francisca de Urúspura Cairasco y M. que contrajo nupcias en Las Palmas, con Don Juan de Alviturría, falleciendo en agosto de 1675. Fray Juan M., nació en Gran Canaria y escribió "Historia de los Milagros de Nuestra Señora de la Caridad", impresa en Cádiz, en 1737. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia M., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los M. pregonan los siguientes valores: la Plata corresponde al símbolo de la Luna, pureza, sinceridad, templanza, clemencia y amabilidad son las características espirituales de la familia, a las que hay que añadir otras como el afán de victoria y éxito y la elocuencia.